Si sigues mi trabajo (podcast, clases de meditación, contenido) te invito a que tomes en cuenta lo siguiente:
1. Estoy aprendiendo y cambiando constantemente
No soy un experto que lo tiene todo resuelto. Todos los días descubro cosas nuevas, a través de mi propia experiencia y de las enseñanzas de otras personas. Mis ideas no son fijas ni absolutas, sino que están en constante transformación.
2. Cuestiona todo lo que digo
Ten siempre una mirada crítica acerca de lo que transmito. Pregúntate: Esto que dice Pedro ¿tiene sentido para mí? ¿funciona en mi realidad? ¿resuena con mis valores? No me creas todo tan rápido. Cuestiónalo, digiérelo, adáptalo y compruébalo en la práctica.
3. Siempre quedarán cabos sueltos
Los temas que toco son complejos y es imposible abarcar todas las posibilidades, variables, capas, excepciones y subtemas que existen en un solo episodio del podcast o en una sola clase. Nunca consideres nada como una verdad total. Revisa qué hay más allá, explora las áreas grises.
Dicho esto, ten por seguro que todo mi trabajo lo hago siempre con las mejores intenciones. Constantemente estoy revisando mi corazón para asegurarme de hablar desde el mejor lugar posible. Siempre procuro que mi mensaje sea consciente, respetuoso e inclusivo. Siempre busco que mi trabajo aporte algo positivo al mundo.
Estas son algunas cosas en las que creo en relación a la práctica de la meditación. Te invito a que las tomes en cuenta.
*Última actualización: 4 de enero de 2021*
1. Sin práctica no hay cambio
No importa cuántos libros leas, ni cuántos cursos tomes, al final, lo único que da resultados es poner lo aprendido en práctica. Sentarse a meditar tampoco es suficiente, las enseñanzas espirituales sólo tienen sentido cuando las aplicamos en la vida cotidiana, constantemente, momento a momento.
2. Nuestro camino espiritual debe contribuir al bienestar de los demás
Es importante buscar nuestra propia paz interior, pero debemos tener cuidado de no convertir nuestra práctica en un camino individualista y autoindulgente. Para lograr una verdadera transformación, debemos ver más allá de nosotros mismos.
3. La imperfección es inevitable
No podemos esperar perfección en nuestra práctica, debemos ser pacientes con nosotros, con el proceso y con los resultados. Este es un camino infinito. Con curvas, pendientes, caídas y retrocesos. Pero también es un camino noble. Que siempre nos da la oportunidad de levantarnos, abrazarnos, ver hacia adentro, volver a comenzar y seguir caminando a nuestro ritmo, cargando nuestro corazón en las manos.
4. No necesitamos todas las respuestas
Es posible creer que las grades respuestas a las grandes preguntas están en algún lugar: en un maestro, en una religión, en un libro, en un documental. Pero no es así. Las grandes respuestas no las tienen nadie y está bien. No las necesitamos. Podemos soltar las incógnitas existenciales y simplemente dedicarnos a vivir con base en nuestra propia sabiduría interior.